Nuestra Tierra enfrenta un grave problema climático que es evidente. Para abordarlo, tenemos a nuestra disposición varios procesos, como por ejemplo el efecto fotovoltaico y la hidrólisis del agua. La combinación de estos métodos puede proporcionarnos alternativas perfectas a las fuentes de energía contaminantes tradicionales, ofreciendo una solución viable para reducir la contaminación y contribuir al cambio climático necesario.